
Pippa Ehrlich y James Reed guionizan y dirigen para traernos a la pantalla pequeña: Octopus Teacher o lo que el pulpo me enseñó (2020). El protagonista, Craig Foster, narra en primera persona los aprendizajes que interpretó de visitar a un pulpo durante un año.
A partir de aquí podríais decir ¿Qué tiene de especial esto?
- 2020: Premios Oscar: Mejor largometraje documental
- 2020: Premios BAFTA: Mejor documental
- 2020: Sindicato de Productores (PGA): Mejor documental
- 2020: Sindicato de Directores (DGA): Nominado a mejor dirección / Documental
Esto tiene de especial.
Altamente galardonada por la crítica y por los principales acreedores de la cultura popular. Pero ¿Qué gracia puede tener un pulpo que, según dicen, enseña cosas?

El pulpo es hipnótico. Este verano, sin ir más lejos, hice por primera vez esnórquel (muy original) y me fascinaron cuatro cosas:
1- Se esfuma el miedo totalmente a la incertidumbre del fondo marino, de repente al verlo todo, ya nada es insólito.
2- La sensación de que puedes volar, ya que las cosas las puedes observar en 3 dimensiones, subir y bajar.
3- Impacta visualmente y a nivel perceptivo, el mundo marino en persona es fascinante.
4- Vi varios pulpos.
Increíble anécdota. Los pulpos que vi eran muy pequeñitos, se desplazaban muy lentamente e iban de camuflaje siempre. Por lo que me comentaron en la escuela de buzo (también me bauticé en el mar) son difíciles de ver.
Si no habéis visto ninguno de muy cerca, el documental dramatizado te aportará millones de primeros planos para tu regodeo y gusto personal. Una de las primeras frases que se dicen en el documental es:
El fondo marino puede parecer un mundo marciano, extraterrestre.
Craig Foster, 2020, bajo el mar.
No le falta razón, si no fuera por la costumbre que tenemos asociativa a ellos, parece que son realmente de otro planeta. Dado que el documental dura casi dos horas, os resumo los puntos más relevantes con spoilers intuitivos. De nada.
- El pulpo es capaz de mimetizarse en colores casi en cualquier entorno.
- Utiliza su composición de invertebrado para cambiar su forma y parecer granulado, liso o incluso puntiagudo.
- Es un animal sumamente inteligente. Aunque su inteligencia se equipara a la de un perro o un gato.
- Muy desconfiado al principio pero si te normaliza puede acercarse más a ti.
- Su principal depredador (en el documental) es el pez gato.
- Su principal alimento y su caza más característica es a los crustáceos. Sí, se come langostas y cangrejos.
- ¡Se regeneran! son como el maldito Picolo en Dragon ball. Si le cortas una patita en 100 días vuelve a ser igual de grande que las demás.
- Viven solitarios o solitarias.
- Utilizan objetos para ocultarse como conchas o algas. Las mueven con sus tentáculos y se las ponen alrededor.
- Cuando se sienten amenazados pueden torear a un pez gato, ponérsele encima para que no pueda cogerle y despistarlo en algún momento para volverse a esconder.
- Sus tentáculos son dedos. Tiene casi 2.000. Imagínate tener tantos dedos ¿Para qué?
- Se aparea una vez en su vida, hacia el final de esta (un año aproximadamente).
- Después de aparearse tienen casi medio millón de huevos a los cuales alimentará con su propia vida, es decir, dan la vida por sus hijos e hijas literalmente.
- Cuando están débiles se ponen blancos y pierden la fuerza para camuflarse.
- Del medio millón de huevos no sobreviven todos, solo unos pocos (¿4?) que vuelven a empezar el documental.
A ver, cada ítem de estos podría ser una metáfora personal pero sinceramente muy cogida por los pelos. A parte de la belleza observacional de ver al animal marino en distintos momentos de su vida, no creo que una vida occidentalmente hablando sea metáfora de ello. Es decir, me parece una capa muy superficial ni al nivel de mr.wunderful.
Entonces me planteo lo siguiente ¿Por qué es tan importante para Craig Foster? ¿Cuál es el motivo del éxito de este documental?
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Al principio del documental Craig nos cuenta sus desventuras y su momento vital bajo, en el cual siente un burnout incipiente que le deja apartado de los rodajes y de los proyectos en general. Había entrado en una espiral apática y con falta de sueño incluso. Entonces ocurrió algo que le devolvió las ganas:
El contacto con la naturaleza. Sentir el agua marina.
Craig Foster, 2020 bajo el mar.
La sencillez a la que se vuelve cuando solo se está en naturaleza y con naturaleza, cuando te embelesas con cada color vivo, con cada momento furtivo, con las sensaciones a flor de piel. Cuando la vida parece más vida y menos metáforas elitistas. Y de repente, observando a un pulpo durante un año, encuentra un motivo para levantarse y documentarlo.
¿Por qué? pues porque se nos olvida lo frívola que es la existencia en nuestra mierda de rutina, en nuestro engendro hecho «porvenir» que nosotros mismos empapelamos y servimos cada día con una manzana en la boca. Porque no hay nada más existencial y vivo que tocar la naturaleza, aquella que sin intervenir, nos mantiene vivos a todos y a todas.
No creo que Craig encontrara una revelación, encontró las vísceras de si mismo envueltas en sensaciones y proyectos por los que volver a motivarse.
Creo que olvidamos demasiadas veces de donde venimos, qué sentido tiene todo y por qué en el mundo animal es todo tan irónicamente sencillo y determinante.
De nada persona que cree que el documental esconde alguna metáfora más que la narrativa de una persona deprimida que se anima teniendo un sentido (quizá monetario indirectamente) para levantarse cada día y ver a su nuevo amor: los pulpos.
A por cierto, el documental está en Netflix. Creo que es una producción suya o algo así.